EL OÍDO Beneficio: Relajación inmediata con sonido Escuchar de forma consciente es una práctica poderosa no sólo para relajarse y centrarse en el momento presente si no también para disfrutar de un maravilloso momento en cualquier lugar y circunstancia que decidas. RELAJACIÓN: En un lugar tranquilo, encontrar una postura cómoda, respirar con atención plena  y  cerrar los ojos buscar sonidos para conectar con tu sentido del oído  ESCUCHA: Comenzar prestando atención a los diferentes sonidos que puedes percibir en tu entorno, probablemente puedas percibir hasta 5 sonidos ambientes diferentes.  Si la escucha la quieres sentir con música, será maravilloso que pongas una canción instrumental y jugar a distinguir los diferentes instrumentos, el violín, guitarra, percusión… Puede ser un viaje sublime. PERCEPCIÓN : Comienza a enfocarte en otros detalles de los sonidos como son:  la textura, tono, volumen, ritmo y dirección de los sonidos que escuchas. Si escuchas música binaural relajante con auriculares, puedes apreciar por qué lado salen las notas. REGRESO:  Si tu mente comienza a divagar, suavemente redirige tu atención a tu respiración para centrarte de nuevo en el momento presente. Luego, vuelve a abrirte a los sonidos que te rodean. AGRADECER:  Puedes agradecer a tus oídos por su labor de conectarte con los sonidos y vivir esa preciosa experiencia. ACCIÓN: Escribir sobre las sensaciones que has tenido, si tu respiración se ha acelerado o ralentizado o si te han surgido recuerdos y emociones.   

EL OLFATO Beneficio: Disfrutar a través del sentido del olfato Esta es una técnica que puedes utilizar para relajarte practicando la atención en el aquí y ahora,  sumergiéndote en una sensación agradable  agudizando tu conciencia sensorial.  ELECCIÓN DEL AROMA:  Puede ser una colonia, una planta, una bolsa de té, un champú, incienso. Algo que te proporcione una experiencia sensorial agradable. RELAJACIÓN. Tomar algunas respiraciones para bajar las pulsaciones y centrarte sólo en el momento presente. OBSERVAR EL AROMA: Con los ojos cerrados, llevar el objeto aromático hacia tu nariz y toma una respiración lenta y profunda. Percibir el aroma sin juzgarlo, simplemente observando sus cualidades: ¿es fuerte o suave? ¿Dulce o picante? ¿Familiar o nuevo? EXPLORACIÓN DEL AROMA: Después de inhalar profundamente, exhalar lentamente y observar cómo cambia el aroma en tu nariz y en tu mente. Prestar atención a cualquier cambio en la intensidad o calidad  a medida que respiras. MANTENER TU ENFOQUE en el aroma presente en tu nariz y en tus pensamientos. Muy probablemente tu mente se va a ir a otros pensamientos. Es normal. Cuando te des cuenta, simplemente déjalo ir como si fuera una nube negra. Suavemente redirige tu  atención  al aroma y a tu respiración.   ACCIÓN : ¿Cómo te hizo sentir el aroma? ¿Hubo alguna emoción o recuerdo asociado? Agradecer la oportunidad de conectarte con tu sentido del olfato y de estar presente en este momento.